Los imprescindibles para los amantes de las bravas en la ciudad
Hay dos tipos de personas: las que dicen que todas las patatas bravas son iguales… y las que hablan el idioma de la verdad y saben que hay auténticas obras de arte servidas en una ración. Y no hablamos solo de picante. Aquí entran en juego la fritura de la patata, el corte, la textura y, cómo no, la salsa. Esa salsa que divide a los fans: los que quieren que pique bien y los que prefieren que tenga más sabor que fuego.
En este recorrido por los mejores sitios de patatas bravas de Zaragoza vamos a ver propuestas para todos los gustos. Y lo mejor es que, si eres de los que disfruta tapeando con amigos, este ranking te va a dar muchas excusas para salir a probarlas todas.
Porque aquí está la intriga: ¿cuáles son realmente las reinas bravas de la ciudad? ¿Las campeonas de concursos o las de los bares de toda la vida? Quédate, que te las voy a enseñar una a una.
¿Eres más de tortillas de patata? No te preocupes, que también tenemos nuestras favoritas, aquí.
1. Foodverzo Street Food, las campeonas intergalácticas
Foodverzo no solo ha conquistado Zaragoza, también se ha llevado el título a las mejores patatas bravas de Aragón en el concurso «Zaragoza Brava 2025». Su receta no es casualidad: patata cortada a mano, fritura perfecta y una combinación de salsas que lo cambia todo. Alioli, un toque de miel y la salsa especial del bravero hacen que cada bocado tenga ese equilibrio justo entre sabor, suavidad y picante.
Aunque el picante no es extremo, sí tiene personalidad, y eso hace que incluso los que no son muy amigos del “pique” puedan disfrutarlas. La ración cuesta 10,50€, pero merece la pena. Además, el ambiente de este local es parte de la experiencia: estética pop, guiños a la ciencia ficción y un aire gamberro que encaja de maravilla con su propuesta de hamburguesas, pizzas y bocados creativos.
- Dónde: Calle de José Luis Albareda, 3.
- Más información: Instagram.
2. Bar Cervino, tradición y premio a la mejor patata
El Bar Cervino, en La Almozara, es de esos lugares que parecen detenidos en el tiempo. Baldosas antiguas, madera curtida y carteles que podrían estar en un museo. Pero lo importante está en la barra, donde preparan unas bravas que en 2025 se llevaron el premio a la mejor calidad y cocinado de la patata en el conccurso «Zaragoza Brava 2025»
La receta es pura tradición: patata cortada a mano, primera fritura a fuego lento y segunda a más temperatura justo antes de servir. El resultado es una patata crujiente por fuera y tierna por dentro. La salsa es una mayonesa suave con ajo combinada con aceite picante, perfecta para quienes disfrutan de un toque equilibrado. Es un buen sitio para ir de vermut.
3. Bar Montesol, las míticas de los universitarios
El Bar Montesol lleva desde 1973 siendo parada obligatoria para generaciones enteras de universitarios zaragozanos. Está en la calle Franco y López, muy cerca del campus, y cualquiera que haya pasado por allí sabe que sus bravas son casi un rito de iniciación.
La clave está en su salsa: un alioli con toque picante que cubre las patatas crujientes y doradas. La ración siempre llega acompañada de pan, para que no quede ni una gota en el plato. El ambiente del bar es sencillo y castizo, pero tiene ese encanto de los sitios que nunca fallan.
4. Calamar Bravo, la salsa que lo cambia todo
Aunque su fama venga de los bocadillos de calamares, en el Calamar Bravo también saben que unas buenas patatas bravas son el acompañamiento perfecto. Su secreto está en la salsa casera: una base de ajo y ese toque picante que aporta la cayena.
Lo mejor es que aquí puedes elegir: con picante para los más atrevidos o sin él si prefieres disfrutar solo del sabor. Las patatas son sencillas, pero la salsa es la que engancha. Si vas al Tubo y quieres algo clásico pero con ese “algo más”, pide bravas junto con tu bocadillo de calamares y entenderás por qué este sitio nunca pasa de moda.
- Dónde: Calle del Cinco de Marzo, 14.
- Más información: Facebook.
5. El Picadillo, premio a la mejor salsa
Si hablamos de mejores bravas de Zaragoza, El Picadillo merece su lugar. En el concurso Zaragoza Brava 2025 se llevaron el premio a la mejor salsa, y no es casualidad. Cremosa, equilibrada y con un toque de sabor único que las hace inconfundibles.
La ración cuesta 6 €, y en un bar con más de 40 años de historia en el Casco Viejo, el ambiente es tan importante como el plato. Aquí se respira tradición, desde sus torreznos hasta las tapas clásicas que acompañan cada ronda.
6. Bar London, las más baratas (y generosas)
Junto a la universidad se encuentra el Bar London, famoso por tener las bravas más baratas de Zaragoza. Por 3,5 € tienes una tapa generosa con mayonesa de pimentón y pimienta, que les da un sabor distinto al habitual.
El local es amplio, ideal para grupos de amigos, y siempre está lleno de estudiantes. Además de las bravas, su carta de bocadillos y tapas económicas lo convierte en un clásico para comer bien sin gastar mucho.
- Dónde: Calle de Pedro Cerbuna, 5.
- Más información: Instagram.
7. O Fogar, bravas con tres niveles de picante
El O Fogar es conocido por sus tortillas rellenas, pero también se ha hecho un hueco en el mundo de las bravas. Su propuesta es diferente: patatas con alioli, cebollino fresco y la posibilidad de elegir entre tres niveles de picante.
Eso hace que sean perfectas para todo tipo de paladares. Han sido finalistas en el concurso Zaragoza Brava y no es casualidad: la fritura es impecable y las salsas tienen un punto original que engancha.
Ubicado en la zona de Heroísmo, es una parada obligatoria si te gustan las tortillas tanto como las bravas.
- Dónde: Calle del Heroísmo, 43.
- Más información: Instagram.
8. 7 Golpes, bavas hojaldradas
En pleno Tubo, 7 Golpes rompe con todo lo que conoces de las bravas clásicas. Aquí las sirven en forma de bloques rectangulares de patata hojaldrada, acompañadas de mayonesa de jalapeños. Una combinación sorprendente que se ha convertido en su plato estrella: casi todas las mesas lo piden.
El local es moderno y creativo, con dos plantas y una carta que se nota trabajada. Baos, burratas, bombas de patata… Todo hecho sin precocinados. Pero las bravas, sin duda, son las que más fama han conseguido.
Si buscas una experiencia diferente, estas bravas son un must.
9. La Jamada del Tubo, bravas con salsa coreana
La Jamada, del chef Antonio Arrabal, es un restaurante de cocina viajera donde cada plato tiene influencias internacionales. Y sus bravas no se quedan atrás: patatas con salsa coreana y espuma de alioli que cuestan 5,50 €.
Han sido finalistas en el concurso Zaragoza Brava y representan esa fusión entre tradición y modernidad que caracteriza al local. La Jamada está en pleno Tubo, y es perfecta para quienes buscan algo distinto y atrevido.
10. El Patio del Plata, bravas con toque dulce
En el corazón del Tubo encontramos El Patio del Plata, un local que se atreve a reinventar las bravas. Aquí las patatas son súper tostadas, llevan sal negra por encima y una salsa única que mezcla sabores.
La ración cuesta 6€, es generosa y, sobre todo, diferente a lo habitual. Si eres de los que cree que ya lo ha probado todo, aquí te van a sorprender.
Como ves, las patatas bravas de Zaragoza son todo un mundo en sí mismas. Desde las campeonas premiadas hasta las más baratas y generosas, cada bar aporta su sello personal. La próxima vez que salgas de tapeo, atrévete a probar varias y saca tus propias conclusiones. Eso sí, te aviso: ninguna decepciona.
Preguntas frecuentes
¿Dónde están las mejores bravas de Zaragoza?
Según el concurso Zaragoza Brava 2025, Foodverzo tiene las mejores bravas de la ciudad y de Aragón, aunque hay otros bares míticos como Montesol o Cervino que son imprescindibles.
¿Cuánto cuesta una ración de patatas bravas en Zaragoza?
Depende del sitio: desde los 3,5 € del Bar London hasta los 10,50 € de Foodverzo, que fueron las campeonas del concurso.
¿Todas las bravas en Zaragoza son picantes?
No. Hay bares como Calamar Bravo que ofrecen la opción sin picante, y en O Fogar incluso puedes elegir el nivel de intensidad.
¿Qué diferencia a las bravas de Zaragoza de otras ciudades?
La variedad. En Zaragoza encontrarás desde recetas clásicas con alioli hasta propuestas creativas con salsas coreanas, jalapeños o incluso con toques dulces.
